martes, 25 de febrero de 2014

YO TE DEJE


Te he dejado tomar los misterios
que laten con la paz en los que aman
que gritan con las voces del silencio
y juegan con los nervios y la calma

Yo te deje tomar todos los sueños
y que tus toscas manos los cambiaran
acomodándolos a tus anhelos
opacando el brillo de mis ansias

Yo te deje tomar todo lo bueno
que guardaba prolija en mi alma
hasta que apareciera el compañero
que con sílabas en verso dibujaba.

Yo te deje tomar todos mis miedos
para que los perdieras en la nada
creída en el final a mis desvelos
y hoy se puede leer tu nombre en mis lágrimas

Y te deje partir, en el momento


que supe que mi amor no te llenaba.

lunes, 24 de febrero de 2014

NO SE


No se, si un día, cuando el sol ilumine
el azabache brillante de tus ojos,
se pueda leer mi nombre en los reflejos.
No se si en el secreto de tus sueños
se esconde la figura de esta niña,
que supo enternecer a un viejo témpano.
















Hoy sos árbol florido en primavera
y aun te ves erguido como un lirio,
Pero cuando el cansancio te frente los impulsos,
pasadas estaciones de hojas secas.
Derretidos los años por la prisa.
Quebradas tus pupilas satisfechas.
Sintiéndote vencido y a la espera
que el Dios venga a llevarte a otra vida.
Te acordaras de cuanto yo te amaba
y esbozarás a penas tu sonrisa...
Y yo ya no recordare, que te quería.

Publicado en 1999 en el Libro Secretos de Mujer


TU MAGIA


Bolsillo colmado de dulces fantasías
Patio de juego de los sueños de tus hijas
Cabalgando en un cuento con tus nietos
Inflo nubes a tus pies el  Señor Bueno
Y ahora también estás llenando lo s cielos.
















Espías en los rayones del crepúsculo
Por  recostar la luna en la laguna
que supo consolar tantos desvelos.
Y en la sala de la noche abrís el juego
Amontonando estrellas como fichas.
Y al no va más, la suerte toca a un punto.
Y abajo entre viñedos suena un beso.
 Y un juguete hace feliz a un niño.
Y algún trasnochador de los inviernos
Abriga  a los que duermen sin un techo
en las plazas por pobres o por viejos.










Y una viola salida de la funda 
repara desconsuelos.
Y bajas por el hilo del roció
a husmear los pensamientos.
Y salen de los labios de mi madre
tus conceptos.
Ríe la picardía de tus ojos en tu nieto
Y el otro prefiere los café al pelotero
El grande es calladito y responsable
Esconde el corazón de su abuelo.
Y tu princecita ya quiere vivir sueños
La Nena cambia el mundo en 3 segundos
Con la magia y la gracia de su viejo
La Mayor es la madre que has querido
Y yo te encuentro  en cada verso,
Y hay ilusos que creen que te has ido. 
( a mi Padre publicado en Diario de Cuyo 2012)




A MI PADRE


Te beso la niebla de aliento infinito
Y disolvió tu imagen en el misterio
de la ausencia continua de los muertos.










El sonsonete del reloj es el que apaña
la traición del silencio del tiempo.
Y no te dejo ver que el porvenir
Fue  la estación pasada.
Te fuiste desgastado de  alegrías
Y entero de vivir todos tus sueños
Envuelto en este eterno amor  que profesamos
 y esperamos se espeje  desde  el cielo.
( publicado en Diario de Cuyo 2011)

INTENTANDOLO


Rezando entre los zondas,
por sujetar mi sombra al alma
Empuñando los sentimientos
hasta que se haga migajas.
Los brazos de mis montañas,
me consuelan desde que faltas.
Ellas me señalan hacia arriba,
indicándome por donde andas.










Para que entienda que tu partida,
por alguna razón,  esta justificada
Será  que ellas también
en la punta de sus ojos
han congelado  lagrimas
Para seguir de pie sin derrumbarse
por hondas y silenciosas nostalgias.
Solo cuando se deslíen sobre el río
 susurran su pena a las aguas.
Yo estoy tratando de entenderlo
Pero si no puedo tengo esperanza.
Que entre las manos de  Dios
 tu alma de niño ya este acunada.
Aquella que escondiera atinadamente,
Bendito mi Cristo, en tus entrañas
Reglándome el honor  de ser tu hija
 a la que siempre  tanto cuidabas
Porque mi espíritu rebelde y soñador,
era como un espejo para  tu alma.
Por eso acercabas
almohadones a mis caídas
Antes que yo llegara a pasarlas,
Guiando  el silencio de mis duelos
a estallar en profundas carcajadas.
Gritando la verdad y separando
Como siempre el maíz de la saña
Regalando momentos exquisitos
como cada uno de tus charlas.
Tu gusto en debatir deshojando conceptos
con tu juego exacto de palabras.
Recorro esos instantes que vivimos
porque añoro, sentirme acompañada.
En medio de esta angustia miro a Cristo,
 que como vos, yo se, que nunca falla.
En esa fe, voy por la pendiente
enmascarando lágrimas que extrañan
Y como las montañas congelé el semblante,
 pero ritmos de tonada las derraman. 
(publicado en diario de Cuyo 2011)

viernes, 14 de febrero de 2014

Recordandote

Recordándote.-
Inútil desahogo de nostalgias
usurpan el suspiro de mis horas

disfruto a manos llenas la inconsciencia
de rociarme el aliento con tu sombra
Escondo lunas de ahogadas frustraciones
En el cansancio de lluvia entre mis labios
Mi estructura de pie huele a desierto
Marca tarjeta en la aurora la frase











es hora de levantarte el pañuelo
y caminarte opuesto.
A veces florecen otros sueños
y la noche apuntada
corres el telón
Y el rasgo blondo 
que te descubre al mundo
me mira desde el pozo 
de la mirada que beso. 
A. Azul  C.E.  
 Publicado en 2012 en  Antología Internacional -



Viento Zonda

Gravita invisible, deshilachando cerros
meciéndose entre soles de fuego
Jugando inconsciente entre los rayos
a prendido una chispa entre sus vuelos.
Ardiente huye en busca de las aguas,
que se abrazan  mimosas a las rocas
soñando evaporarse hacia los cielos.
Frenético  de ardor incontenible






sigiloso y audaz sórdido irrumpe.
Desparpajado en ráfagas rabiosas.
Sacudiendo la tosca alfombra árida
Zarandeando desiertos, el cabalga.
Acorralando al criollo hasta su casa.







Dilapida el esfuerzo de los vinos,
azotando su infancia de racimos,
dejando esperanzas postergadas
Aireado entre bucles se endereza.
Empolvando las calles, avisadas,
con ruidos de bullicios de fantasmas.
Rabioso cual malones en la riña
Atropellando puertas, a los golpes, pasa.
Y en su asfixia, despedaza y quebranta
el breve verde salpicado en las veredas ;
excepciones,  que a ruegos se levantan.
Desgastando el semblante de las rosas
que patrones cobardes no entregaran.
Robándose el descanso de la siesta
Desmantelando fiestas de guitarras
alargadas hasta las madrugadas.
Destapando los vinos en reserva
excusa de mejorar la voz quebrada
En el pórtico del  río, su furor amaina.
Relajándose apenas, a sorbitos se calla.
Aunque sigue fogoso, pues esto es herencia
de los gauchos melosos de mi patria.
Le vuelve, la conciencia, y mira los despojos
que en sus correrías el desbaratara
el viñedo en sollozo, villas destartaladas
Los arboles mostrando las hojas que han llora
Y criollos que el cansancio de los años 
y yacen en el suelo recostadas
le quitaron el cuerpo, para seguir viajando







Quedaron los paisajes, en polvo patinados
y en suplica y clemencia la tierra reclinada
Ahogado en la vergüenza se va sin hacer ruido
abriéndole la puerta al fresco de su amigo
que siempre le camina a las espaldas
Vuelto al nido y  solo entre montañas,
promete no olvidar aquel  camino.
Por si bebiendo al sol, el muy ladino,
en lugar de broncear prenda una llama.
Sonrojado imagina  el rezongo del pueblo
que sabe que le lleva en las entrañas
cual marca descriptiva de su estampa.-
Águila Azul - Claudia Espínola - Noviembre de 2012
Premio de Honor concurso internacional de poesía



Mis Noches

Mis Noches .
El guiño del crepúsculo atisba
el diluir del sol bajo las faldas
de montañas con piedras románticas.
Ambientando, los ríos cantan alto  












mientras se sincronizan las luciérnagas
que decoran con brillos nuestros campos
Recluida, la claridad como aguaitando
el momento esencial donde ella llega.
La señora del Sol a su reinado.
El telón de este día va cerrando
la obra exquisita de los sauces
Que dramatizan sed, rozando el agua.
Se acurrucan las hojas a los nidos
que un astuto  gorrión los usurpara.
Encorvada la parra hacia el racimo
disimula el caquéctico semblante
del esfuerzo banal de otros cultivos.
Las cabañas se  abrigan con sombreros                                          
de libros medio abiertos  boca abajo.  
refugiadas a la sombra de un canino             
de espíritu sagaz y estampa escuálida                  
Los niños se han dormido frente al brillo      
De los ojos de madre que aun no faltan
La ciudad coquetea con destinos
Bajó el resplandor de marquesinas                                 
Provocando al pueblo a transitarla
La juventud despierta a sus instintos
Con amplia liviandad en sus espaldas
Hay romances abiertos a la vida
Y algún otro cariño que se calla
Ventanas leales. Faroles que se apagan…
La acrobacia del tiempo, ocultará memorias
Esculpiendo la expresión de la mirada.
Simétrica en sentidos,  la noche,
Resbala, mis pies hasta tu casa
Después deslumbra el alba y la partida
Y en metafórica mímica el paisaje
Despierta satisfecho la jornada
La armonía del fresco en las mañanas
y los charcos de siestas en los días
y el imán de las noches que en fe llama
a sosegar mi esencia en tus caricias.
Claudia Espinola
A.Azul.
Publicado en libro Escritura Compartida